De días

Hay días en que uno sólo quiere gritar. De emoción. De desesperación. De soledad. De falta de comprensión. De ánimo o de su ausencia. De saturación.
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También hay días en que uno no tiene tiempo ni de respirar. Por el trabajo. Por los proyectos. Por los pendientes. Por los sueños. Por las ideas o por su inexistencia. Por el ritmo de vida.
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Pero hay algunos en los que no hay nada que hacer. Por falta de ganas. Por desinterés. Por terminar todo antes. Por que sólo no hay.
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Los hay en que todo brilla. Por el sol. Por la gente. Por una sonrisa. Por un detalle. Por una palabra. Por una expectativa. Por una rendija de posibilidad.
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Hay otros en que todo se ve gris. Por el clima. Por las incertidumbres. Por los "quizás" y por los "hubiera." Por los "que tal si." Por las hormonas. Por que así lo decidí.
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Algunos son mixtos. De repente no puedes respirar, todo brilla pero tienes ganas de gritar. Cualquier combinación es posible.
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En realidad no sé como se ve mi día hoy. El fin de semana fue de felizmente agobiante. Lleno de expectativas y planes. Hoy podría disfrutar de los placeres culpables que me son regalados. Pero sigue existiendo la borrosa incertidumbre. Quiero aprender a convertir la incertidumbre en motivos para reírme de la vida y con ella. Y contigo. Hay de días a días. Y siempre hay forma de solucionar las disyuntivas. Sólo hay que encontrar los motivos. Pero eso nadie puede hacerlo por tí. Hay de días a días. Pero sólo tú decides como será el tuyo. 1440 minutos que no regresarán nunca y que sólo tú decides que hacer con ellos.

Ah que calorcito, eh!!

Hace calor, el aire acondicionado es una ficción que se compensa con un ventiladorsucho que no se enfría ni solo. El ruido que hace me recuerda que estoy perdiendo el oído, porque no escucho ni un carajo de lo que dicen en el pasillo ni mis vecinas. Por momentos estoy convencida de que el vapor caliente sale de todos los cuerpos que circulan a mi alrededor. La temperatura en el ambiente resulta inversamente proporcional a mi ánimo para leer y concentrarme en un posicionamiento para destrozar a Derbez. Y entonces, empiezan a fluir los nonsense por mi cabecita. Alguna vez leí, hace tiempo ya, las ideas de estudiosos en materia de desarrollo que me irritaron y que ahora, me pregunto si tendrán algo de razón. Estos teóricos alegaban que el desarrollo es producto de la geografía. Sip. Decían que los países que se encuentran más cerca del Ecuador --y por ende, donde hace más calor, los que son más tropicales y tienen mayores recursos naturales-- están condenados a no desarrollarse nunca como aquellos donde el clima o la escasez de recursos, obliga a la gente a buscar fuentes de energía, formas de alimentarse, etc. (Claro que no hay que irse al extremo, no estaban diciendo que el Polo Norte fuera a ser súper desarrollado). Pero en parte, pensemos en la delimitación de "Norte" vs. "Sur" y en términos de desararollo, el primero se relaciona de inmediato con avances, mientras que el segundo se queda en el "tercer mundo."

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No recuerdo bien a bien todo lo que se argumentaba a favor de esta teoría. Lo que si recuerdo es que en ese entonces, me pareció ofensivo condenar al subdesarrollo a una nación, por el sólo hecho de que ésta contara con una geografía y recuersos naturales específicos. Si bien nunca he sido partidaria de los determinismos, el día de hoy me puse a pensar en que tal vez habría algo de razón en la manera en que el clima afecta el desarrollo. Si nos ponemos a pensarlo, es donde mayores recursos naturales hay, que esta teoría decía que no habría desarrollo ¿porqué? será que cuando tenemos todo somos unos flojos... que sólo estirar la mano y tienes un árbol de alguna fruta... por poner un ejemplo... ¿será que eso nos obliga menos a esforzarnos? ¿y si nos esforzamos menos nos desarrollamos menos? no lo sé, sólo sé que hoy el calor ha causado un ambiente de pasmación (si es que eso existe) entre la gente que me rodea en la oficina. No es sino hasta que el ventilador logra hacer correr un poco el aire, que se empieza a ver un poco más de movimiento. Luego parece que ya va a llover, pero ¿qué sería de este mismo lugar con esta misma gente, si todos los días vivieramos a 40° y no tuvieramos aire acondicionado, como ahora, sino sólo unos ventiladores que generan más calor por sus motorcitos? ¿tendríamos el mismo nivel de productividad? ¿funcionaríamos igual? Sé que en este país, la gente que vive en el norte sufre periodicamente de ataques furiosos de climas extremosos, pero al parecer, el que exista ese extremo que te dificulta las cosas, los ha obligado a adaptar sus ciudades para que funcionen y como resultado, la zona norte del país es bastante próspera, en comparación con el sur tropical...

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No soy pro-determinismos, y creo que si revisara un mapa, vería que las latitudes de los países supuestamente desarrollados vs. los que se supone no se desarrollarán nunca, encontraríamos fallas a la teoría.... tampoco le creo a Sherlock Batiz cuando dice que el incremento en la temperatura genera que la gente sea más violenta y que por ende, aumenta la delincuencia... pero el calor de esta tarde me ha puesto a pensar en que tal vez el clima determine no nuestras vidas, pero sí algunas costumbres que nos llevan a ser (o no ser). Tal vez mi reflexión caiga en el terreno de lo obvio, pero que más da, de todas maneras no logro concentrarme!!!!

Reflexiones al vacío

Si. Uno necesita en definitiva, un día de no hacer nada. Relajarse. Cerrar oídos a palabras necias. Enciendo la música. Cierro los ojos. No quiero ver a nadie, ni escuchar a nadie, quiero estar sola. A veces hace tanto bien la soledad. Es una cuestión meramente de espacios. De generar una dinámica conmigo misma y tratar de entenderme mejor. Saber que la inercia todavía no me toma como rehén. Reencontrar ese mundo en el que habito y que rara vez comparto, esa realidad alternativa que existe sólo en los vaivenes de mi mente. Sentir sólo la voz atrapada en la cabeza y que no sale. El silencio que te rodea y te regresa a donde perteneces, justo en ese momento en que necesitas tomar decisiones importantes. Hacerme conciente de mi propia evolución. Y me dejo llevar. Me resulta fascinante el poder del silencio cuando se combina con la soledad. Un domingo así cada vez que aumenta la temperatura y me vuelvo más visceral, me regresa a mi misma. Mirarme al espejo y saber si la imagen que me regresa es la que quiero. Un domingo así me lo debo recetar cuando la brújula se me descompone y por más que la golpeo contra la pared parece no reaccionar. Unas cuantas anotaciones por aquí, otras tantas por allá, para dejarme testimonio, para no olvidarme, para redescubrir la magia que mueve y motiva y las trabas que se han acomodado en el camino que me tiene aquí. Respiro. En la soledad, es perceptible como entra y sale el aire de mi cuerpo. La vida que inunda el momento en que la noto. Sonrío. De vez en cuando, esta soledad reafirma y convence. Delinea senderos. O los rectifica. Hoy el balance es positivo. Life's great.

Musical Baton

Como soy re-obediente... ahi les va el bastón... ah no verdad? que no soy bastonera... el batón, quise decir...

Salvador me pasó el Musical Baton. Es un meme (lo que sea que eso signifique) en donde te hacen unas preguntas y luego pasas una estafeta (baton); es algo así como una versión electrónica de "La Papa Caliente", "Un avión- un avión-cargado-cargado-deeee..." o lo que en la primaria se conocía como "Pásala Si No, Te Embarazas®" Como no queremos que nada de eso pase... ahí vaaaaaaaamos:

Volumen total de música en mi computadora:3.45 GB (en el folder de donde saco todo.... Salvador, no manches tienes MILLONES DE ROLAS)
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El último CD que compré:Cita conÁngeles, de Silvio Rodríguez (EXCELSOOO el maestro).
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Canción reproduciendose ahorita: No te vayas, Kings of Tomorrow (por supuesto, en basico.fm)
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Cinco canciones que escucho y significan mucho para mi (si si, torv-adicct y que?):
Llovizna, de Fernando Delgadillo
Come undone, de Robbie Williams
Amiga, de Miguel Bosé
Canción del Elegido, de Silvio Rodríguez
Joyride, de Roxette
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Cinco personas a quienes les paso el baton:
Mi gallo
El chikis
El conde
El friend
Alfonso

Azu cumplió con el batóooon!!!!

Talachas

Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, claro, sólo requiere un poco de tiempo y todo sale. Un tantito de concentración, un ratito de no pelar los pendientes. Hacer a un lado el tiempo y olvidarte de que está corriendo. Tic-tac-tic-tac. No lo estoy escuchando. Tic-tac-tic-tac. No lo estoy viendo. Odio pagar impuestos. Tic-tac-tic-tac. A veces crecer no suena divertido si tengo que organizar facturas y fracturas. Tic-tac-tic-tac. Time's running out. Tic-tac-tic-tac. Abrieron una nueva convocatoria de financiamiento yeeeeeeeeeeeeeiiii!!! Tic-tac-tic-tac. ¿Cómo hacer que las agencias de viajes me consigan tarifas más baratas? Tic-tac-tic-tac. Todo es urgente. Tic-tac-tic-tac. No contestan. Me pasan al encargado de becas. Beca todavía en hold. Junio está a dos semanas de distancia, ¿qué más da esperar? Tic-tac-tic-tac. Life's good. Tic-tac-tic-tac. Londres está a tres meses de distancia. 5 de septiembre y 14 horas de vuelo. Tic-tac-tic-tac. Visas y más visas. Papeles y más papeles. El banco. La contadora. Los impuestos...¿ya dije que odio pagar impuestos? El seguro de gastos médicos. ¡Demonios, no he ido al chequeo post-salmonela! Tic-tac-tic-tac. Bodas por todos lados. Bebés muchos en las cercanías. Tic-tac-tic-tac. ¡Mi hermana pasa a secundaria! Tic-tac-tic-tac. Coyuntura sin terminar todavía. Bomberazos al cuarto para las doce. Tic-tac-tic-tac. Extraño a mis amigos a veces. Tic-tac-tic-tac. ¡¡¡Ya tengo un tagboard y aprendí a poner el contador de visitas!!! Tic-tac-tic-tac. ¡Cuántos libros me gustaría leer! ¡Cuántos más tengo en stand-by! Tic-tac-tic-tac. ¡Estrenaron Episodio III! Tic-tac-tic-tac. Siempre gritos en mi casa. Siempre interrogatorios continuos. Siempre un hogar donde llegar y que es mío. Tic-tac-tic-tac. Viajes a los que no puedo ir. Proyectos nuevos. Tic-tac-tic-tac. Me encanta refugiarme en un abrazo y olvidarme que el tiempo no me espera. Amo tus brazos. Tic-tac-tic-tac. Time's running out. Nevermind. Life's great.

Time to move on

Abrir ciclos implica cerrarlos en algún momento. La cuestión está en saber que es el momento de cerrarlos. O abrirlos. Seguir siendo quien soy a pesar de la evolución. Mantener la esencia, las convicciones y el núcleo duro de lo que quiero ser y lo que no quiero ser. Cada ciclo trae consigo un cúmulo de ideas, percepciones, sensaciones y emociones distintas. Cada uno puede generar una época de transición particular, a veces de crisis transicional.

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Fue fácil saber que se terminó el ciclo prepa, simplemente porque se terminó su tiempo y pasé a la universidad. Time to move on. Dejas atrás el tiempo de la escuelita en el que todo es súper fácil y divertido, o lo que le sigue. Para mí, se terminó la época de permanecer en un lugar donde todo tenía matices similares. Mi vida en la prepa fue muy divertida, pero el esquema --debo reconocerlo-- era el de un mundo donde nadie se salía de las fronteras tácitamente establecidas. Desde la manera de vestir hasta la forma de pensar, todas las niñas guadalupanas (estudiaba en el Colegio Guadalupe), en lo general, éramos muy parecidas. Las líneas a seguir eran las que marcaba la prepa, en realidad no había mayores conflictos que la fiesta, el novio o el examen, tal vez una que otra bronca familiar... que lindo fue! Nivel de incertidumbre: muy bajo. Time to move on.

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Luego vino el ciclo ITAM, que sin duda fue muy distinto. El tránsito fue conciente, emocionante y afortunado. Me di contra la pared cuando creí que podía llevar las cosas igual que en la prepa. Empezando por la distancia, que por primera vez en mi vida se convirtió en un issue y siguiendo por la diversidad de absolutamente todo, ha sido una de las épocas en que más he aprendido. Nivel de incertidumbre: bajo. La transición ITAM no fue tan evidente como la anterior. Si bien se terminó el tiempo de materias, siguió el largo periodo de tesis que se combinó con la primer chamba en serio que tuve. El ciclo no terminaba de cerrarse, mientras se abría una etapa laboral sumamente divertida. Además, trabajaba dentro de una de las casitas más alejadas de mi alma mater, pero todavía dentro de ella. No para ella, ni siquiera a su nombre ni me pagaban de las colegiaturas, no... era para la ONU, pero como era consultoría independiente, el ITAM era donde día a día le dedicaba mi tiempo al Diagnóstico. Terminó el proyecto, vino la tesis y definitivamente se prendió de nuevo la alerta time to move on. La transición fue mucho menos suave. Nivel de incertidumbre: moderado.

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Se me había terminado el tiempo de los caminos definidos. Lo que seguía era lo que yo eligiera. La transición estuvo marcada por la duda, la crisis post-tesis no fue sencilla. Ya tenía trabajo, pero hasta elegir donde trabajar me costó dejar una chamba que parecía mi sueño, pero que pagaba casi el mínimo. Fue momento de definiciones. Pasó. Se mezcló con el inicio de cada vez mayores roces en casa. Por todo, por la hora en que llego, por la forma en que tengo mi cuarto, por que no paso tiempo con ellos, por que gasto mucho, por cualquier cosa, en realidad. Ahora trabajo. ASAN me ha permitido aprender directamente dentro de círculos muy interesantes. ASAN ha sido un lugar para definir lo que quiero y no quiero también. Ahora aprendo y si, disfruto mucho lo que hago. Pero a poco más de un año de estar aquí, siento que no es lo mío. A veces me exaspera la pasividad de las coyunturas, o la monotonía de las rutinas. A veces me emociona profundamente algún proyecto, otros me causan conflicto. Time to move on?

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Tal vez el anuncio del cambio viene con la maestría. El ciclo ASAN ya no me hace feliz. Quiero un lugar donde el sólo hecho de asistir me emocione. Quiero un trabajo que me despierte nuevamente la pasión de actuar, de ser útil. Nivel de incertidumbre: alta. Sin caminos más que los que me toca crear, la transición me emociona, la idea de cambio me pone de buenas. Salir del mundo que me envuelve hoy me resulta irresistible. La transición, sin embargo, también resulta complicada, en tanto implica dejar atrás una forma de vida para cambiar de gente, de espacio, de ideas, de todo. Un cambio mucho más radical que los que he vivido hasta hoy. La transición parece marcar que es tiempo también de cerrar mi ciclo netamente familiar para abrir uno propio, uno para mí. Crear mi espacio. El grito en mi cabeza, al inicio silencioso, ahora resulta estruendoso: time to move on.

Hoy

Hoy quisiera aprender a volar
aprender a soñar
aprender a sólo sentir y callar.

Hoy me hace falta el suelo
me hace falta el sueño
me hago falta a mi misma...

No me quiero perder,
no quiero olvidar el camino que dibujo
ni quien he sido, ni lo que quiero ser.

Hoy quisiera valor para forjar
para construir
para saltar la incertidumbre
y abatir la ansiedad

Sólo dejar de lado los miedos,
atajar a los demonios,
detener el tiempo
y luego avanzar.

Cita con Ángeles

El nuevo disco fue el pretexto para planear un concierto. Sublime. Maravilloso. Exquisito. Inmejorable. En una sola palabra: orgásmico. Así fue el concierto de Silvio Rodríguez al que fui anoche. O al menos así fue como yo lo viví. Lluvia torrencial en el DF, después de días y días de seco calor intenso. Buena señal, llegar escurriendo al auditorio nacional. En realidad la buena señal era que no me importara, señal de que llegaba con buena actitud. ¿Qué? ¿hay otra forma de llegar a un concierto de Silvio Rodríguez?

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Sería largo muy largo relatar todas y cada una de las emociones que me invadieron mientras escuchaba al maestro. La intención de estas líneas no es ser exhaustiva, sino plasmar la racha de ideas que me deja el concierto. Una a una, las letras de las canciones fueron haciendo lo suyo: desde la protesta contra la guerra , hasta la más profunda admiración por un lugar, por un hermano, o por el amor. Además de las letras, destaca la música misma, los sonidos que llenaron el auditorio entre las guitarras, las percusiones, la flauta, el clarinete, el contrabajo y esa voz particular que tiene Silvio. Una especie de magia se transmitía a cada nota, virginal o ramera, pero a fin de cuentas, la canción, fue la que esparció una atmósfera de afortunada paz.

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Llegué a una conclusión simple: son hombres como este al que vengo a escuchar cantar, con todas sus ideas vertidas en canciones, los que hacen una diferencia, para él y para los que lo escuchan. No porque comparta todos y cada uno de sus puntos de vista, sino porque son los que no se callan, los que dicen lo que piensan, lo que creen y lo que viven de tal forma que los demás quedamos extasiados ante una verdadera expresión artística de convicciones. Y que el cielo me libre de cordura. Se trata de lo que transmite, de la manera en que lo hace, de la energía que llena el lugar en el que reúne a miles de personas para escucharlo hablar. A fin de cuentas, un Hombre, sin adjetivos.

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Cuando llegó Casiopea casi me levanto de un brinco de mi lugar, aunque Playa Girón me llenara de recuerdos de una isla que visité hace tiempo y que en cada rincón me invitaba a cantar... No importa si no llegó Abracadabra, o muchas otras que al igual que las que tocó, me hubieran hecho la noche. Tampoco importó que no me supiera la letra de muchas de las canciones que escuché. Es la suma de sonidos, de voces, de ideas, el manejo de las palabras, las metáforas y toda la energía que emana del conjunto lo que me deja un sentimiento de enorme satisfacción y profunda sonrisa.

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El éxtasis no es un estado que se evapore en unas horas. Hoy todavía me siento llena de esa energía que me dejaron las poco más de dos horas y media de Silvio. Planeo alargar este sentimiento escuchando una y otra vez esta Cita con Ángeles que me traje del concierto.

Querido diario

A punto de que pase todo, pero sin que pase nada, me siento hoy. Mi mente no encuentra paz entre los vaivenes y desatinos del Derbez que quiso ser canciller y resultó un cáncer para la diplomacia, me la vivo haciendo corajes ante su probada ineptitud. Nada de que aprendo en el camino, como dijo cuando llegó a esa que me gustaría algún día, fuera mi casa. Para colmo de males, el Fox sale con cada puntada, que no sé si es para reir o llorar que siempre que salga del país se le ocurra andar diciendo cada cosa!! imagínate que ahora dice envidiar al parlamento de Bolivia... con lo jodidos que están, siendo uno de los dos únicos países que en el continente entero tienen la categoría de País Altamente Endeudado, sin posibilidades de salir de esa situación por la extrema pobreza y descomposición política y social que existe. ¡Y mi presidente los envidia! claro, tal vez sería más fácil gobernar un país donde nadie opina porque la represión es ley, porque con hambre es difícil hablar y es más fácil sacar el machete... pretexto perfecto para que el Estado haga gala de sus mejores hombres de armas. Eso sería más fácil a tener que dialogar, consensar y hacer política, no grilla... sería más fácil así que tener que planear, hacer estrategias y dibujar un camino coherente y sólido que impulse el crecimiento de una nación plural y enormemente rica y desaprovechada. El hombre está que se muere por salir del gobierno, no tiene vergüenza al hacerlo tan evidente. Y claro, se me olvidaba el rayito de esperanza que más que resultarme esperanzador por algún lado, me preocupa cada vez que lo escucho hablar. Estoy tentada a desconectar el radio de mi coche cada que me subo, pero me gana el vicio de ir escuchando los noticieros. Si miro hacia afuera, encuentro un mundo que se desmorona entre deseos de paz, y la verdad, qusiera ser capaz de encontrarle forma a este rompecabezas, pero tengo la sensación de que me siguen faltando piezas. Mi chamba es tratar de entender el desmadre de relaciones entre países y explicárselo a legisladores de un no muy H. partido... y las piezas que no encajan en realidad no les preocupan, sólo quieren saber qué hacer ¿y qué les decimos si yo misma no sé que hacer? bueno, pero la verdad esa dinámica es divertida.

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A las mil y un cosas que van tejiendo mi entorno, y que no puedo evitar me afecten en el día a día de chamba, de vida y de mi personita, se suman las ansias por la incertidumbre --cada vez más pronta a desvanecerse-- sobre la beca, sobre los créditos y sobre como viajar a Reino Unido de la mejor manera y sin endeudar a mis nietos. Y curiosamente crecen las ansias al ver más cerca de lo que esperaba, la concreción de misión-masterlondres. A punto de pasar, pero sin que pase todavía, sigue. La misión-ong también está haciendo de las suyas, ya que como va pasando el tiempo, crecen los pendientes, las tareas, los problemas que solucionar y las chambas que atender. Querido diario, no puedo, aunque neta me encantaría, partirme en mil pedazos!! Aunque la verdad, he de confesarte que soy una quejumbres de primer mundo, porque me la paso realmente bien con tanta cosa y disfruto esta ansiada ansiedad, tan a punto de pasar todo, que algún día tendrá que suceder, ¿no crees? Lo mejor de todo es que para disipar esta cadena de ansiedades, me voy a relajar de lo lindo escuchando al maese Silvio en la noche. Ya te contaré!